Pérdida de la mano derecha y una herida en la cara de Miria
Heridas leves de todas las claymores
Miria realizó un ataque a La Organización aprovechando el alboroto generado por el Desastre de Lautrec. El tercer día de Shinrou, Miria decidió atacar La Organización, dejando incapacitada a Tabitha, y viajando a los cuarteles de La Organización. Preocupados por un posible ataque con el comienzo del Desastre de Lautrec y la muerte de Alicia y Beth, La Organización había llamado a un gran número de guerreras activas a los cuarteles, las cuáles se encontraron con la anterior número 6. Miria fue capaz de rápidamente dejar inconscientes a todas las guerreras, incluyendo a Audrey y Rachel. Cuando la victoria se veía segura para Miria, La Organización puso en la batalla a dos gemelas que serían las sucesoras de Alicia y Beth, y a Raftela, la Número 10. Con un poderoso y avanzado Enlace de Almas las gemelas lograron poner a Miria en aprietos y liberar yoki, lo que permitió que Raftela la manipulara y la dejase indefensa. Con visiones de Hilda, Miria fue expuesta y cayó bajo las espadas de las demás guerreras. Sin embargo, las guerreras, sorprendidas por haber sido dejadas vivas por Miria, comprendieron las profundas intenciones de Miria, y decidieron unirse a su causa, dejándola herida pero sin matarla. Ahora con todas las guerreras de la Generación de Clarice, Miria fue capaz de comenzar la Rebelión de Claymores.